Mira tú que cosas que este año se me ha escapado la navidad. Y el año nuevo.
No es fácil sentir el espÃritu navideño cuando no hay rastro de Papa Noel; o cuando no se tienen noticias del sorteo del gordo; o no se asiste a la retaila de cenas tradicionales; o cuando no se monta el arbolito de navidad, ni el belén ni las guirnaldas de colores; o no se escucha un solo villancico o pandereta; ni tampoco se hacen varias idas y venidas al Corte Inglés para cambiar regalos; o cuando no se toman las uvas durante las campanadas. Además, también requieren estas fechas algo de frio, para poder lucir la bufanda nueva, y que la nieve de corcho que decora los escaparates no resulte demasiado fuera de lugar.
Pues bien, entre Ko Lanta y Ko Jum, un par de las muchas islas del sur de Tailandia, me lo han puesto muy difÃcil. ImagÃnate un lugar donde sólo hay playas salvajes y desiertas bordeadas por la jungla, arena fina y conchas, un ritmo isleño tranquilo y alegre donde los dÃas comienzan al amanecer y terminan poco después de las espectaculares puestas de sol (no hay electricidad en esta parte de la isla), menús a base de batidos de fruta fresca y arroz con curri y marisco, y de vez en cuando alguna excursión en las barcas
de pescadores a otras islitas cercanas para bucear entre corales y pececitos de colores.
Lo dicho, asi no hay manera.
Espero que al menos tú hayas podido disfrutar de estas fiestas como mandan los canones. Sé muy feliz en este nuevo año. Paco
Album de Islas de Tailandia en Flickr