Para nadie es una sorpresa si digo que en nuestra historia reciente hemos sido testigos de una migración sin precedentes de Latinoaméricanos que fueron a España en busca de una oportunidad.

Lo que quizás si te resulte sorprendente, al menos eso me ocurre a mÃ, es que todos y cada uno de los latinos que yo he conocido en este nuevo viaje por sudamérica (muchos ya están de vuelta, la mayorÃa se vieron obligados a regresar a sus paÃses de origen cuando el trabajo comenzó a escasear en España con la dichosa crisis) fueron bien tratados, aprovecharon su oportunidad y se han traÃdo un buen recuerdo. La mayorÃa me decÃa que añoraban España, que querÃan volver de vacaciones.

Para mà esto demuestra que salir, viajar, conocer de primera mano un lugar, adquirir una experiencia propia, y ver otros puntos de vista por uno mismo, es la mejor manera de derribar tabues, prejuicios, verdades falsas y estereotipos no cuestionados.

Donde antes (12 años atrás) era habitual escuchar «los españoles nos robasteis el oro y violasteis a nuestras mujeres«, ahora se escucha «me encanta España, me gustarÃa volver«. Uno de los beneficios de viajar es que ahora sà somos bienvenidos en Latinoamérica. Esta nueva actitud no solo ha hecho mi viaje mucho más agradable, si no que además me enorgullece que piensen bien de nosotros. No tiene precio sentirse bien tratado y querido. ¡Y todo gracias a los viajes!